Los conductores de coches, peatones, ciclistas y motoristas están expuestos a cientos de peligros en las vías. Por supuesto, bajo ninguna circunstancia, nadie quiere ser protagonista en un evento lamentable durante su camino, pero nunca está de más tener a mano el número de un abogado especialista accidentes tráfico Madrid, que le ofrezca el asesoramiento necesario en el momento que lo requiera.
Si el conductor del vehículo es el responsable del hecho, lo más recomendable es llegar a un acuerdo amistoso con la otra persona involucrada. De esta manera, ambos pueden completar el parte amistoso que otorgan las compañías aseguradoras para estas ocasiones y que sirve para reunir toda la información que explica un evento.
Este es el escenario ideal, pero solo ocurre cuando ambos conductores están de acuerdo con la causa que originó el accidente; de lo contrario, debería estar presente la policía o la Guardia Civil, quienes serán de gran ayuda también en el caso de que los daños materiales sean relevantes.
Las autoridades deberán identificar las causas del evento y realizar el atestado, que es un documento fundamental para especificar el responsable del hecho y hacer la reclamación de los daños a las aseguradoras, bien sea de forma extrajudicial, o bien sea a través de acciones legales. En los casos más delicados, siempre es bueno contar con la ayuda de un abogado derecho penal, que dé una orientación profesional precisa.
Sobre la víctima
Los lesionados tienen derecho por ley a reclamar una indemnización por los daños sufridos (materiales, físicos o personales). La cuantía de este resarcimiento económico dependerá de las lesiones y de los intereses que estas cantidades generen, desde la fecha en que ocurrió el accidente.
Ahora bien, si los daños fueron únicamente materiales sobre el coche, es importante que informe a la compañía aseguradora en un lapso de siete días. Luego de esto, un perito evaluará el estado del vehículo y comparará con los aspectos especificados en el parte del accidente. Como propietario, tiene derecho a solicitar la reparación y el importe que represente.
En todo caso, siempre hay que estar precavido, porque es mejor evitar estar involucrado en cualquier tipo de accidente, ni siquiera como víctima, pues ninguna indemnización podrá resarcir el mal momento o las secuelas que puedan originarse a partir de tal hecho. También toda esta situación genera un desajuste de la planificación de las personas, una inversión no prevista, posiblemente el coche pueda quedar deshabilitado por un tiempo. En definitiva la prevención es el mejor aliado.
Pero si le toca vivir una experiencia de esta índole, mitigue las consecuencias acudiendo sin mayor retraso a los abogados especialistas en accidentes de tráfico.