Conocer los mejores campos de golf de España es una de las formas de hacer turismo que actualmente se encuentra muy en boga. Puede ser interesante para quienes lo practican y divertido para aquellos que nunca han tenido la oportunidad de tener contacto con él.
Pero y ¿de qué trata? En España existe un sinfín de opciones conociendo sus playas, montañas y monumentos; incluso vale la pena visitarla hasta por su gastronomía. Ahora bien, existe un sector turístico que todavía se encuentra consolidándose en esta amplia área relacionada con los viajes.
Se puede decir que el turismo de golf son las visitas y/o traslados que realizan turistas, sean nacionales o extranjeros, para llevar a cabo su práctica. En el proceso, tienen la oportunidad de visitar las mejores áreas que contempla el país, resto de Europa y el mundo. Dicho desplazamiento, por lo general, se da desde el lugar de origen a destinos turísticos, que de una manera u otra facilitan el uso de cada espacio golfístico con el que se cuente.
¿Qué tan interesante resultaría hacer un turismo así?
Vamos a estar claros, en su mayoría va dirigido a personas que lo juegan. Más, ¿por qué no hacerlo aquellas que por alguna razón se encuentren interesadas en aprenderlo? Sean novatos que quieran mejorar su hándicap o inexpertos en su totalidad, pero que quieran conocer esos campos maravillosos.
Las posibilidades son muchas y no necesariamente se ha de pasar todo el día jugando golf. Aunque, si es de la preferencia del grupo, se puede organizar una clínica especializada. Sin embargo, hay múltiples opciones turísticas que pueden alternarse con el deporte.
Muchos señalan que es un sector que debe abrirse más, puesto que se encuentra limitado a promocionarse dentro del target de quienes lo juegan. Apartándose y generando cierto “aislamiento” que mantiene fuera a potenciales clientes o el crecimiento de un mayor número de jugadores, que a la larga serán esos futuros clientes.
Crear planes diversificados en temporadas ya es mucho, tales como planes de veranos, para expertos, novatos y/o niños, o los que quieran aprender sin saber absolutamente nada del deporte. Esto sería ampliar el turismo del golf y no solo estar dedicados a los grandes especialistas o personas de un alto poder adquisitivo.