Cualquier persona que entra en contacto directo con los alimentos durante su elaboración, transformación y envasado; los transporta y distribuye; los almacena en un establecimiento o en definitiva, los manipula y entrega al consumidor final debe recibir una apropiada formación seguridad alimentaria con el objeto de garantizar la protección e higiene de los mismos.
El objetivo perseguido es que todos los elementos involucrados en la cadena de producción, distribución y despacho de productos alimenticios adquieran las competencias imprescindibles para suministrar bienes a la población en el nivel óptimo de conservación y salubridad. De esta forma, se evitan alteraciones de la salud por consumo de víveres dañados o contaminados.
Aparte de la manipulación de alimentos, per se, un área dual cubierta en el curso es nutrición y dietética. Estos son dos conceptos que se complementan y cuya ausencia impide llevar una vida saludable.
En la nutrición se incluyen aquellas sustancias que deben ser absorbidas diariamente para solventar la necesidad de nutrientes de cada ser humano. Los requerimientos son variables y dependen del individuo, edad y sexo, actividad física que desarrolla y condición general.
La dietética considera todos los factores importantes para que la combinación de comestibles que satisfagan las demandas nutricionales, sea totalmente equilibrada. Pero al mismo tiempo resulte armoniosa y agradable al usuario, teniendo en cuenta la individualidad personal.
Una dieta balanceada y hecha a la medida, que presta atención a la contextura, etapa de la vida y actividad ejecutada del usuario establece buenos cimientos para una salud integral, que incluye no solo los aspectos físicos, sino también los psicológicos. Así la persona poseerá ventajas al enfrentar las exigencias diarias y tendrá mejores posibilidades de salir adelante.
Sabemos que eludir el envejecimiento prematuro es una de las consecuencias de una buena nutrición, pero asimismo tiene como función disminuir y controlar la aparición de enfermedades y dolencias en la sociedad. El estudio de las alergias e intolerancias alimentarias, forman parte de este proceso educativo.
El conocimiento y la aplicación de estas dos áreas de la alimentación benefician de manera especial a los niños del comedor escolar y a los ancianos de las residencias geriátricas, pero además a los comensales de restaurantes y a toda la gente en general. Su importancia no debe ser subestimada.